BEIJING Dia 6 Templo de los Lamas , Torre del Tambor , Torre de la Campana
Hoy hay mucho que hacer, es
nuestro último día.
Temprano llega el sastre, y… sorpresa, nos queda todo
fenomenal, un cambiazo respecto al día anterior . Ya estamos contentas.!!!!!
Paso la tarjeta del sastre , pues por precio y calidad merece la pena totalmente.
Los del hotel, que son muy
majos, nos dejan quedarnos con las habitaciones hasta la una, que volveremos a ver
la opera.
Cogemos el metro, como no,
y nos vamos al Templo de los Lamas, Templo de Confucio; Templo del Tambor y Campana que están por la misma zona.
Metro (Línea 2 o linea 5 ) Bajar en la estación de
Yonghegong, salir de la estación por la salida C (Exit suroeste), y caminar hacia el sur unos 400 metros.
Templo
de los Lamas
El Templo Yonghe o Templo de los Lamas, es la lamasería más grande y más perfectamente
conservada en la actual China.
Construido inicialmente en
1694, durante la dinastía Qing, este edificio fue la residencia del emperador
Yongzheng cuando él era sólo un príncipe. Sin embargo, en 1744 la dinastía Qing
cambió formalmente el estado de la vivienda a la de una lamasería, y así Yonghe Lamasery se convirtió en el
centro nacional de administración de los Lamas.
Para acceder hay que
recorrer un sendero en sentido norte hasta la Puerta del Zhaotai o de las Tres
Hojas. Flanqueando la entrada principal está una Torre de la Campana en la parte oriental y una Torre del Tambor en la occidental;
encontraremos inscripciones en tibetano talladas sobre grandes caparazones de tortugas.
El Salón de la Armonía y la Paz (Yonghegong) es el principal palacio
de Yonghe Lamasery y dentro hay tres Budas de bronce - Sakyamuni en el medio,
Kasyapa-Matanga a la derecha y de la izquierda Maitreya. Hay 18 estatuas de
Arhats (discípulos de Buda) situadas a ambos lados de la sala. El cuadro en la
pared oeste es de Avalokitesvara con sus miles de manos y ojos.
Al norte del Salón de la
Armonía y la Paz está el Salón de
Protección Eterno, Yongyoudian, que era salón Emperador Yongzheng cuando
vivió allí como un príncipe joven y en el momento de su muerte, su ataúd fue
colocado allí. Ahora, una estatua de Bhaisajya-guru el Budha de la
Longevidad
De Yongyoudian continúa
hacia el norte a la Falundian (Salón de
la Rueda de la Ley), que es el lugar donde los Lamas leen las Escrituras y celebran
ceremonias budistas. El Falundian comprende características muy especiales, ya
que su estructura contiene los estilos arquitectónicos de ambas nacionalidades
tibetana y han. Antiguamente, era la morada de las esposas del emperador. Una
gran estatua de Tsong Kha-pa, un antepasado del lamaísmo se muestra aquí en el
centro de la sala
En la Sala del Pequeño Potala está
el Trono del Dalai Lama y
el Trono del Panchen Lama.
En el Pabellón de las Mil Felicidades (Wanfu ge ) hay
una gran estatua de Budha en madera de sándalo tallada en un tronco gigantesco,
regalo del emperador al Dalai Lama por su ayuda en una revuelta del Tíbet.
Abren para su visita de
9:00 a 17:00
A la salida del templo.
enfrente del metro, cruzando hay una calle que entra en el Houtong Wuadaoying. Se reconoce porque tiene un arco a la entrada.
En esa calle encontramos un
montón de tiendecitas antiguas, con cosas preciosas y como no
acabamos llevándonos algo. Sobre todo laminas de caligrafía china, que nos encantan y no habíamos encontrado hasta la fecha.
Son tiendas locales con objetos que deben llevar años allí , por la cantidad de polvo que acumulan, pero encantadoras para pasar un rato revolviendo por sus estanterías.
La siguiente calle va a dar
al Templo de Confucio, muy restaurado pero interesante.
De allí la siguiente parada
es para ver las Torres de la Campana y
el Tambor. Caminamos pues no esta lejos, pero hoy hace bastante más frío y hay niebla y eso
nos cansa más.
Caminando por el Houtong , nos encontramos........ Eso no lo esperábamos!!!!
Torres de La Campana y del Tambor
Ambos se pueden visitar,
pero nosotros no tenemos tiempo de subir a los dos, y decidimos subir al Templo del Tambor por las vistas de la ciudad (en un día claro) y para ver
tocar los tambores a la antigua (cada 30 min).
La campana y el tambor
fueron utilizados originalmente como instrumentos musicales en China. Más
tarde, sin embargo, fueron utilizados para decir la hora. Ya en la dinastía Han (206 Ac-220), había "una campana de la
mañana y un tambor al anochecer. Decir la hora por la campana y el tambor
jugo un papel importante para ayudar a las personas que vivían y trabajaban,
mientras no había otro medio para realizar un seguimiento de las
horas. Como resultado, el campanario y el tambor se convirtieron en arquitecturas públicas, y se
construyeron ampliamente en casi todas las ciudades en todo el país desde la
dinastía Han. En la historia de su construcción, el campanario y el tambor
de Beijing son los más grandes y más altos. Su diseño es único, en el que
se colocaron delante y hacia atrás, no como el sentido tradicional del pie
derecho e izquierdo horizontalmente.
Se extienden al norte de la línea del eje Beijing-sur en
el distrito de Dongcheng. Las Torres
de Campana y el Tambor son construcciones visiblemente prominentes y
representan el símbolo de esta ciudad antigua. Fueron construidos en 1272,
y reconstruidos dos veces después de dos fuegos. En un período de la
historia que fueron el centro de tiempo de cuentos de la capital durante las
dinastías Yuan, Ming y Qing (1271-1911).
La Campana
Es de ladrillo y piedra con dos plantas: hay una puerta
con arco en los cuatro lados de la torre en el primer piso, y se puede subir a
la segunda planta por unas escaleras de piedra. Una puerta de arco fue
construido también en los cuatro lados de la segunda planta. Además, hay
una ventana de piedra a cada lado de las cuatro puertas. Colgando de un
marco de madera de ocho cuadrados de la segunda planta, la campana de la torre
es la más grande y más fuerte en China. Tiene 7,02 metros de alto, incluyendo
los colgantes, con un peso de 63 toneladas. La campana es de cobre, y se
puede oír el sonido redondo y claro desde muy lejos.
El Tambor
Situado a 100 metros
al sur de la torre de la Campana, la Torre del Tambor se colocó en una de base
de ladrillo de 4 metros de alto, de piedra. Tiene 46,7 metros de alto, un
poco por debajo de la torre del campanario que tiene 47,9 metros de altura.
Esta torre es también un edificio de dos plantas, la primera planta del Comité
Chino para el Fomento del Arte Minoritarias. La segunda planta contiene el
área de exposición.
La costumbre de
decir la hora tocando la campana y golpeando el tambor fue abolida después de que
Pu Yí, el último emperador de China, saliera de la Ciudad Prohibida .
Desde la
víspera de Año Nuevo de 1990, el dulce sonido de la campana que había desaparecido
hace mucho tiempo comenzó a resonar en Beijing. Después de estar
somnoliento durante casi un siglo, el Tambor también fue golpeado de nuevo en
la víspera de Año Nuevo de 2001. Se toca cuatro veces al día, durante 15
minutos a la vez desde 1 de enero de 2002. A partir de entonces, cada
víspera de Año Nuevo, el tambor es golpeado con la campana 108 veces para
enviar una bendición para el pueblo.
Esta zona de
los campanarios y el tambor floreció con la dinastía Yuan (1271-1368), cuando sólo estaban de pie
detrás del palacio imperial. Fue el distrito centro de la ciudad, llena de
tiendas y negocios. Gracias al mayor desarrollo de los negocios, la calle
en frente de la torre del tambor se convirtió en la calle más comercial de las
dinastías Ming (1368-1644) y Qing (1644-1911). Durante el período
republicano de China (1911-1949), muchos de las personas pobres, junto con los
comerciantes que venden artículos hechos a mano (artesanos) y los vendedores de
bocadillos y productos alimenticios locales (puestos de comida) invadieron el
lugar entre las torres de la Campana y el Tambor, que atrajo a personas de
todas las profesiones y condiciones sociales. Hoy en día, se puede subir a la
torre del campanario y las torres de tambor para tener una vista de pájaro de
admirar toda la ciudad, e incluso participar en la actividad de tocando la
campana y el tambor, apreciando todo tipo de folk-costumbres, como el dragón y
la danza del león, y otras exposiciones personalizados folk-.
Cuando llegamos estaba
cerrado y no podemos subir y decidimos pasar, estamos muy cansados y hacia mucho
frió. Buscamos en los alrededores un restaurante que nos han recomendado,
Little Saigón. Después de varias vueltas lo encontramos, pero nos dimos cuenta
que no teníamos tanta hambre y decidimos tomar un café en una pastelería justo
al lado, también recomendada, donde damos cuenta de un cafetito caliente y unos
pasteles riquísimos.
Le Pettit Saigon,
141, Jiu Gu Lou Dajie, +86 10 6401 8465, www.lelittlesaigon.com, un restaurante
francés-vietnamita, un poco hippy pero encantador, en verano tiene una terraza
en el tejado muy mona.
Muy cerca también y en
dirección a Hou Hai y nuestro hotel,
está la calle Nan Luogu Xiang, otro Houtong
precioso (hay que ir a verlo ya que nunca se sabe cuánto tiempo van a durar los
Houtong en Beijing). Como ya estábamos reconfortados decidimos caminar atravesando el Houtong, hasta el hotel.
Nos gusta mucho pasear por
esas zonas típicas de Beijing, aunque como no, están siempre llenas de turistas
locales.
Llegamos justitos al hotel
a sacar las maletas de las habitaciones, pues en nuestros cuartos se cambiarán
los actores de la ópera.
La ópera duro como 45 minutos y mereció la pena verla. No es que nos encantara, pero había que conocerlo. Ademas al ser una representación privada fue mas corta y como mas directa. Fue una suerte que estuviera esa delegación del gobierno y que nos invitaran a ello. Eramos los únicos huéspedes del hotel invitados.!!!!!
Acabamos como a las dos y ya con todo recogido, decidimos darnos un paseo hasta la Ciudad Olímpica.
Como siempre, al metro y directos hasta allí. Cuando fueron los Juegos Olímpicos hicieron una linea de metro que esta muy nueva y te deja allí mismo.
Hoy hay mucha niebla / contaminación , no se sabe bien y se ve con dificultad. Llegamos con luz de
día y poco a poco va oscureciendo y los edificios empiezan a iluminarse y
aquello esta precioso. Impresionante el Nido , el Centro acuático.... todo.
Como no decir que estaba de turistas locales hasta la bandera!!!!!
El canal de la Villa Olímpica tiene forma de dragón, el símbolo de China.
Ya se acerca la hora de
irse, volvemos al hotel. Antes de irnos todavía nos da tiempo para tomar un
caldito caliente cerca del hotel, reconfortante.
Salimos a las 11,30 en Air
China con destino Singapore, donde llegaremos a las 6 de la mañana. Esa misma noche,
los visitantes a… Madrid.
Ha sido toda una experiencia, un descubrimiento, de un país complejo por su cultura y a la vez absorbente precisamente por eso. No me importaría estar mas tiempo, mas bien me gustaría mucho. Es una pena los grandes problemas que tiene de contaminación, de trafico... pero es un país donde quiero volver.
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